Electronic Arts y el estudio Mythic presentan lo que es la evolución final de un largo y costoso proceso de creación que ha logrado mejorar con el paso del tiempo, aprendiendo de los errores y aciertos de sus competidores, sobretodo del que será su máximo rival World of Warcraft sin olvidarnos de ESDLA Online, juego del que toma prestadas algunas de sus características y ambientación. Ya que su apartado gráfico opta por acercarse al realismo al igual que en el MMORPG de la Tierra Media, olvidándose así del discutible look de dibujos animados de WOW.
Las comparaciones siempre son odiosas, pero cada imagen cada vídeo de WAR nos recuerda a World of Warcraft. Y es que cuesta dar vida a un mundo propio, que respire, lleno de vida cuando los diseñadores tan solo cuentan como base un juego de mesa de guerra, cuya principal característica son los ejércitos en miniatura de sus distintas facciones y los llamados codex o manuales de las facciones, el cual a pesar de su elaborado trasfondo argumental, sus complejas campañas, sus héroes y sus adaptaciones literarias, carece de escenarios físicos más allá de dioramas, la mayoría de ellos obras no oficiales de fans.
Es por ello que no nos sorprende que Warhammer Online: Age of Reckoning sea un juego multijugador online de estética y temática muy convencional, que nos sumerge en un universo sobradamente familiar, un mundo fantástico medieval en el cual dos grandes facciones que bien podrían ser las huestes de la Alianza y la Horda se enfrentan en un duelo a muerte por el dominio de la tierra antigua.
A su favor y para no acusarles de plagiar el MMORPG de Blizzard podemos decir que Games Workshop ideó Warhammer mucho antes de que apareciera el primer Warcraft, aunque es evidente que si el argumento, las razas y facciones surgieron de las mentes de GW, tanto el concepto como la mecánica de juego son muy similares a las vistas en el reino de Azeroth.
No obstante si fijamos nuestra atención en aquello que se cuece en el corazón de Age of Reckoning nos percataremos de hasta que punto se distingue de WOW, y no solamente por contar con una superioridad tecnológica más que obvia.
No obstante si fijamos nuestra atención en aquello que se cuece en el corazón de Age of Reckoning nos percataremos de hasta que punto se distingue de WOW, y no solamente por contar con una superioridad tecnológica más que obvia.
A parte de ofrecer un amplio abanico de razas y clases a elegir, véase orcos, goblins, elfos, humanos y seres corrompidos por el caos, siempre comprendidas dentro de las dos principales alineaciones del juego, la Armada del Orden y la Armada de la Destrucción, WH Online ha hecho suyas características de otros MMORPG y en algunas ocasiones las ha mejorado.
Así, disponemos de varias opciones de combate además del típico PvP que por ejemplo nos permiten involucrarnos en batallas a escala masiva como sucede en muchas producciones coreanas del género como Guild Wars. Dichas batallas son como gigantescas quests y se basan en cumplir una serie de objetivos concretos, asimismo podremos disponer eventualmente de la ayuda de fuerzas neutrales, en realidad mercenarios controlados por el juego, siempre que lleguemos previamente a un acuerdo satisfactorio para ambas partes.
Una característica que brilla con luz propia en WAR, en especial durante las escaramuzas masivas Reino Vs Reino, son las llamadas Habilidades Morales que no son tan devastadoras y eficientes como en el juego de mesa pero si se agradece su presencia y aproximan el videojuego a la fuente original. De saber utilizar dichas habilidades podremos infundir temor en un enemigo y desmoralizarlo, algo realmente fácil si se trata de los Goblins y poco efectivo o prácticamente nulo si nos vemos las caras contra los Elfos Oscuros o los mutantes del Caos.
Lógicamente tratándose de un título salido de WH no faltarán un tipo de objetivos todavía mas ambiciosos que el RvR, que vienen a adaptar al código las famosas campañas de guerra. Las campañas que se irán desvelando poco a poco con el paso del tiempo, y en espera que la comunidad de Age of Reckoning se haga más y más grande, nos invitarán a protagonizar una guerra con mayúsculas proponiéndonos como meta la invasión y conquista de un territorio enemigo.
Pero no todo es lucha en los MMORPGS y los jugadores suelen tomarse un descanso y usar el universo persistente como un improvisado simulador social, así que no está de más comentar el talante ¿social¿ de WAR. Visto desde un prisma social, Age of Reckoning es tan útil para relacionarse, conversar y establecer clanes como el WOW y también posee el atractivo añadido de unas quests que persiguen obtener el Tomo del Conocimiento, unas misiones que nos premiaran con relatos e información y son la versión que Mythic hace los Libros de ESDLA Online. Una buena forma de enriquecer su mundo con el uso de creaciones literarias.
Warhammer Online es un título potente y de lo mejor que ha aparecido en el género desde ESDLA Online y Age of Conan, un producto lo suficientemente bueno para atraer a una multitud de jugadores. Aunque el éxito de los MMORPGS es fruto del azar y depende de la reacción de los jugadores, que resulta impredecible.